Memorias de chanchita

Marzo del 2006 fue el mes en que mi amigo Marzio me regaló una lectura de tarot en la que el loco y el ermitaño tomaban mi mano para invitarme a realizar un viaje lleno de saltos, pasión y búsqueda. Claro estaba que el camino se haría al andar, eso me angustiaba un poco, porque quería rutas claras y respuestas rápidas, en ese momento solo veía caos a mi alrededor y no me parecía “cuerdo” tomar una mochila y salir de casa en busca de mi destino mientras las responsabilidades me vestían como segunda piel.

Miles de proyectos me ofrecieron, se caían. Cambié de rumbo mil veces, sin darme por vencida y usando mi Loco comodín, moría y renacía en pocos días.

Aprendí el valor que da la inocencia, recuperando una y otra vez la capacidad de maravillarme. Piedra de río…es mi naturaleza…


Con el ermitaño paseaba de noche, en sueños me mostraba imágenes… rincones que me eran familiares pero lejanos…Un rompecabezas sagrado.


Por momentos me vaciaba entera y recorría mi rabia, las verdades, mis opciones.

El silencio fue mi aliado, la voz que me enseñó a escuchar…el interior.

Me ví envuelta en remolinos interminables que no daban tregua, los dolores que sentí al luchar contra ellos fueron tan grandes, que las fuerzas se acabaron y el sueño comenzó a anestesiar poco a poco la presión…

No se si desperté… ¿Quién podría estar seguro de aquello?

En ese lugar continúo me muevo constantemente, me elevo sin esfuerzo y planeo... llevo mis ojos conectados con el alma y mis sentidos toman formas que dibujan con la luz…

Dibujar con la luz…renacer en mi…

Soy el Mago, La Emperatriz y el Mundo.

Un chanchito vino a visitarme, dice que somos hermanos y que este 2007 es nuestro año.
Bienvenido! Que importa la hora o el día, no tengo nada preparado, pero no sabes como me hacía falta este abrazo.

Feliz 2007